Al menos doce personas han muerto después de un aplastamiento en un estadio de fútbol en la capital de El Salvador, San Salvador, dijeron las autoridades.
El hecho ocurrió durante un partido entre el equipo local Alianza y el equipo Fas de Santa Ana en el Estadio Cuscatlán.
Posteriormente, el partido fue suspendido.
El presidente Nayib Bukele calificó el hecho como «sin precedentes» y dijo que se iniciaría una «investigación exhaustiva».
La policía había dicho anteriormente que siete hombres y dos mujeres estaban entre los muertos, con todas las víctimas mayores de 18 años.
Según los informes, el desastre ocurrió después de que una gran cantidad de fanáticos intentaron ingresar al lugar después de que se cerraron las puertas.
Las autoridades creen que a algunos fanáticos se les vendieron boletos falsos y dijeron que se estaba llevando a cabo una investigación.
Las imágenes compartidas por los medios locales parecían mostrar a los fanáticos que intentaban derribar las barricadas en la entrada del estadio.
Una transmisión en vivo del partido publicada en YouTube muestra que el partido se suspendió después de una aparente conmoción en las gradas. Más tarde se ve a las personas siendo llevadas por los servicios de emergencia en camillas.
También se ve a los fanáticos agitando sus camisetas a las personas en el suelo para tratar de refrescarlas.
«Fue una avalancha de fanáticos que invadieron la puerta», dijo a los periodistas un voluntario del grupo de primeros auxilios Rescue Commandos. «Algunos todavía estaban debajo del metal en el túnel. Otros lograron llegar a las gradas y luego al campo y fueron asfixiados».
El presidente Bukele dijo que «todos» serán investigados, incluidos los equipos, los directivos, los funcionarios del estadio, la liga y la federación.
“Sean quienes sean los culpables, no quedarán impunes”, dijo en comentarios publicados en Twitter por su secretario de prensa.
Las autoridades también dijeron que 90 personas estaban recibiendo atención médica y que hombres, mujeres y niños habían sido tratados por «traumatismos múltiples».
Luis Alonso Amaya, de Protección Civil de El Salvador, dijo que unas 500 personas han recibido atención médica, muchas de ellas trasladadas al hospital.
El ministro de Salud, Francisco Alabi, dijo que la mayoría de los heridos se encuentran estables y que no ha habido reportes de muertes en hospitales.
La Federación Salvadoreña de Fútbol dijo que todos los partidos de fútbol a nivel nacional del domingo serían suspendidos. También dijo que lamentaba lo sucedido y expresó su apoyo a las familias de las víctimas.
El ministro de salud de El Salvador, Francisco Alabi, tuiteó que el gobierno había desplegado ambulancias de hospitales cercanos al estadio y los heridos fueron enviados a diferentes instituciones públicas para recibir tratamiento.
El Sr. Alabi también pidió al público que evacúe con cautela el área para facilitar que los equipos médicos brinden atención.